domingo, 10 de abril de 2016

Vivir el presente

Existen tres únicos tiempos: El pasado, en el cual los hechos sucedieron. El presente, cuyos hechos están vigentes. El futuro, cuyos hechos aún no han sucedido. 
El ser humano durante toda su vida se ha empeñado en vivir solo dos de estos tiempos: el pasado y el futuro. Sin embargo, se olvida de que el presente es el más importante. Vivimos diariamente pensando en lo que ya pasó, en lo que no pudo ser, en lo que hubiéramos podido hacer en tal situación y en los errores que cometimos (el pasado) o, peor aún, queremos predecir lo que va a ocurrir pensando qué cosas van a pasar en nuestras vidas, qué será de nosotros en tantos años o cuán exitosos podremos ser. No obstante, nunca nos centramos en el tiempo que realmente importa: el presente. Nunca nos ponemos a pensar en lo que pasa, en lo que estamos viviendo, en el día a día, en lo que podemos hacer hoy y ahora. 
El tiempo es indiscutiblemente inexorable, es decir, no podemos evitar el paso del tiempo. Con esto quiero decir que no podemos quedarnos estancados por aquellas cosas que no sucedieron, pues hay cosas que, por más que nos esforcemos, definitivamente no deben suceder. Tampoco debemos quedarnos imaginando asustados por lo que va a ocurrir, pues nuestro futuro es incierto. Lo que sí podemos y debemos hacer empezar a accionar hoy y ahora. Debemos vivir nuestro presente, pues las acciones y la toma de decisiones que hagamos en el presente, serán la base de nuestro futuro. 
 El pasado ya fue. El futuro aún no ha llegado. El presente es lo que realmente importa. Así que no te agobies por lo que ya pasó y no intentes descifrar lo que va a suceder. Pon tus energías en lo que pasa, en lo que actualmente sucede. Sólo así podrás ser feliz contigo mismo y estarás en paz con lo que gira en torno a ti.
Pero, si no sabes cómo empezar a vivir tu presente, te traigo unos simples consejos:
*Siente más, piensa menos: Puede sonar un poco raro esto, pero realmente funciona. Sucede que cuando pensamos tanto, dejamos de sentir y de percibir todo lo que está a nuestro alrededor.
*Acepta las cosas que no puedes cambiar: Reconocer que no todo está bajo tu control puede ayudarte a desahacerte del pasado.
*Vuelve al presente: En ocasiones, nos ponemos a recordar cosas dolorosas que ya sucedieron. Hacer eso, es como abrir una herida que ya ha cerrado. Cuando empieces a rebobinar una escena, vuelve al presente sabiendo que lo único que importa es lo que ocurre en estos momentos y que lo demás ya no existe.
Besos♥

jueves, 4 de febrero de 2016

Tenemos que hablar, ¿soy homosexual?

No chicos, no soy homosexual. Soy 100% heterosexual. Escribo esta entrada para hablar precisamente de la homosexualidad.

Según el diccionario, la palabra “homosexualidad”  significa: “Atracción sexual que una persona siente hacia otra del mismo sexo”. Técnicamente, estamos hablando de “mujer con mujer” y “hombre con hombre”. En este punto, nos salimos de la idea de que un hombre nació para reproducirse con una mujer. Pero, ¿sería anormal si un hombre se enamora de otro hombre? ¿Sería malo si una mujer se enamora de otra? No, por lo menos para mí. El amor no mira géneros, solo busca un corazón donde pueda almacenarse.

Hoy en día, la homosexualidad se ha vuelto un tabú. Se ha convertido en un tema sumamente criticado por toda la sociedad. Y es que actualmente, la cantidad de personas que se inclinan sexualmente por otra de su mismo género ha crecido notablemente. Sin embargo, a la hora de criticar, las opiniones han sido más negativas que positivas. Pero, ¿a qué se debe esto? En mi sincera opinión, se debe a que INFINIDAD de personas no aceptan la diversidad. Si, la diversidad. No todos somos iguales. En mi caso, me inclino por una persona del sexo opuesto. Sin embargo, tengo amigos gays, amigas lesbianas y amigos bisexuales. No ando criticando a nadie, pues a mí nadie me critica por mi orientación sexual.

Imaginemos un mundo donde lo normal sería ser homosexual y lo anormal seria ser heterosexual. Seria horrible que nos criticaran, nos hicieran bullying por nuestra orientación sexual. ¿Lo ven? Así se sienten las personas homosexuales. Al final de cuentas, TODOS somos iguales. En estos momentos alguien consagrado en la Iglesia leerá esto y dirá “los homosexuales irán al infierno”. Ahora pregunto, ¿Quién coño eres para decir quien se va al infierno? ¿Eres Dios? No, no lo eres. Yo creo en Dios y sé que su proyecto de vida no fue unir a dos personas del mismo sexo, pero el ama a todos sus hijos por igual. No los critica, no los señala con el dedo. Entonces, ¿Quiénes somos nosotros para andar criticando a una persona por su orientación sexual? Pues, la homosexualidad NO es una enfermedad como el cáncer o una condición como el síndrome de Down. La homosexualidad es una simple orientación sexual. Ser homosexual, ser heterosexual o bisexual no va a determinar quiénes somos o como debemos comportarnos.

Quiero que todos sepan que todos somos iguales, no hay distinciones. Tú, si estás leyendo esto y criticas o te burlas de alguien por su orientación sexual, para de hacerlo. No es lindo. No es divertido.


Besos

jueves, 28 de enero de 2016

Decirle "adiós" al dolor.


“Me desprendo. Ya es momento. Me desprendo de todo lo que me hace daño. “

¿Por qué sufrimos? Es necesario. Sufrir, a veces nos hace más fuerte. Digo “a veces”, porque no siempre sufrir tiene un propósito, no siempre sufrir nos conducirá hacia el crecimiento personal y/o profesional. Sufrir es la manera de darnos cuenta que hay cosas que tienen valor y, si las perdemos, no somos nada. Por ejemplo, a veces peleamos con nuestros padres o con algún ser cercano a nosotros. Sin embargo, si alguien trata de dañar a nuestro ser querido, lo defenderemos con uñas y dientes si es necesario.

En el proceso del crecimiento emocional, es necesario sufrir para darle valor a ciertas cosas. El problema surge cuando inconscientemente, nos estamos apegando al dolor. El dolor empieza a volverse una rutina diaria y, cuando experimentamos una pizca de felicidad, nos sentimos raros e irreales. Siempre buscamos la forma de volver a nuestra burbuja de dolor, ya que se ha convertido en nuestra zona de confort. Por esta razón, he decidido hacer esta entrada.

Cuidado con el dolor. El dolor, si no se trata a tiempo, puede llegar a ser dañino para nuestra alma. El dolor nos seca el corazón, nos hace guardar rencor, nos hace ver todo con malos ojos. Cuando dejamos que el dolor penetre nuestra alma y nuestro ser, podemos llegar a convertirnos en seres inhumanos, despiadados. Por tal motivo, debemos desprendernos de lo que nos hace daño a tiempo.

Es hora. Es momento de tirar a la basura todo lo que nos agobia y nos hiere. Si es un chico o una chica quien nos hace sufrir, le diremos “bye honey, I’ll be fine without you”. Si es la obsesión por nuestro cuerpo la que no nos deja vivir en paz, le diremos “soy un ser valioso, no soy una etiqueta. Mi valor no se mide por un numero de la balanza”. Si son nuestros amigos los que nos hacen mal, examinaremos bien quienes deben estar y quienes no deben estar en nuestras vidas. Creo que es la hora de sacar todo el dolor que, evidentemente, no nos deja continuar.

No te aferres. No sirve de nada aferrarse a un mal recuerdo, a un mal momento, a una terrible experiencia. No porque algo te haya sucedido una vez, te va a suceder dos veces. Deja que todo fluya. Deja que todo tome su tiempo. “El tiempo cura las heridas del alma”, eso dicen por ahí. No dejes que nada te perturbe. No permitas que una mala experiencia dañe tu vida. Me he encontrado con centenares de personas que me dicen “me fue mal con esta persona. Al final, todos los hombres/mujeres son iguales”. No estoy de acuerdo. ¿Saben la cantidad de gente que vive en el mundo como para amargarse la vida con una sola? El dolor es un reflejo de que nos estamos aferrando demasiado a algo o a alguien demasiado, olvidando que no tiene sentido aferrarse.

Es hora de emprender un viaje. Un viaje sin perturbaciones, sin dolor, sin rabia, sin heridas por sanar, solo nosotros y nuestra vida. La vida es una sorpresa. Cada día te ofrece cosas nuevas. No dejes que tu vida se arruine por aquellas cosas que te hacen daño.


Besos

miércoles, 20 de enero de 2016

La fe.

Hace unos pocos meses, mientras cursaba mi primer año en la universidad, pase por los pasillos del edificio donde debía tomar mis clases de matemáticas. Mientras esperaba a una de mis mejores amigas, escuchaba a dos chicos hablando de Dios. Decidí prestar atención. En su dialogo, pude notar que ninguno de los dos creían en él, pero decidí seguir escuchando. Algo que me impacto fue cuando uno de ellos dijo: “El problema de los cristianos es que siempre necesitan creer en algo. La fe no existe” Juro que en ese momento me quede muy sorprendida por lo que habían dicho. Fue tanta la sorpresa que recibí, que hasta me reí. Me reí, pues es inútil, diría que imposible que un ser humano, sin importar si es cristiano o no, no tenga fe. Antes de nada, ¿Qué es la fe? Según el diccionario: La fe es una confianza o creencia en alguien o algo cuyas cualidades no necesitan ser demostradas. Si se fijan, en ningún momento relaciono la fe con Dios, que si bien, soy muy creyente, no es un asunto que quiera tocar ahora. Señores, la fe es la creencia de lo que no se ve. Es confiar en algo de lo que no podemos afirmar. Es pensar que algo va a suceder aunque no tengamos como probarlo. Ahora, pregunto ¿puede el ser humano vivir sin tener fe? La respuesta es: no. No puede. La fe es lo que mueve cada día la vida de un ser humano. Cuando alguien dice: “Yo sé que puedo lograrlo, todo va a salir bien”, en ese momento, en ese instante, esa persona está teniendo fe. No se engañen, no piensen que podemos vivir sin fe, sin creer en algo.  Todos nosotros necesitamos creer en algo, en lo que sea.

Y tú, ¿tienes fe?


Besos♥

Ser como una libélula.

Hola a todos. Les traigo esta entrada para hablarles de un animal que siento que me representa y también representa a muchos. Con ustedes, la libélula. Se preguntaran, ¿Por qué no un tigre o un tiburón? Aunque no lo crean, la libélula tiene un gran significado. Este hermoso animal representa libertad, crecimiento personal, auto-realización , etc. Pero, ¿saben que cosa me sorprende más? Su rareza. La libélula es rara, es diferente, es linda a su manera, nadie es igual a ella.

El ejemplo anterior, es un espejo de lo que soy yo y de lo que son muchas personas. A veces, nos vemos raros, feos, distintos. Lo que no sabemos es que en esa rareza, esta lo bello de nosotros. Somos únicos, no hay nadie en el mundo igual a nosotros. En ocasiones queremos cambiar algo de nosotros. Que si mi cabello es horrible, que si tengo piernas gordas, que nadie me quiere, que si mejor me hago una liposucción, que si voy al gimnasio porque me veo feo…La cosa es que querer ser como lo dice la sociedad nos ciega, nos hace olvidar que Dios nos ha creado diferentes, únicos y que nuestras imperfecciones nos hacen perfectos. Yo por ejemplo, recurría a miles de dietas, le hacía daño a mi cuerpo, dejaba de comer, hacia ejercicio compulsivo, odiaba mi cuerpo. Aunque aún no me guste mucho mi cuerpo, estoy aprendiendo a amarlo, consentirlo y demostrarle que nos tenemos el uno al otro. Por eso, quiero ser como una libélula, rara, hermosa a mi manera.

Y tú, ¿quieres ser como una libélula?




Besos

¿Hacia dónde voy?

¿Quién soy? ¿De dónde vengo? ¿Cuál es mi propósito en la vida? Estas son preguntas que me hago a diario desde que tengo uso de razón. Todo ser humano se vive preguntando lo mismo. Pero, hay una pregunta que me hice recién hace unos pocos días, “¿Hacia dónde voy?”. ¿Hacia dónde voy con mi vida?, ¿Hacia dónde voy con mis sueños?, ¿Hacia dónde voy con todo lo que me rodea?, ¿Hacia dónde? La respuesta: “no lo sé”. Sencillamente, no lo sé. A veces, siento que no tengo ni idea de dónde vengo o hacia dónde me dirijo. Me siento como si anduviera en un auto sin destino.  Sin embargo, de lo que estoy cien por ciento segura es que voy hacia un buen sitio. Por primera vez, tengo fe. Por primera vez, tengo la certeza de que me dirijo a un buen lado. No sé a dónde, pero si sé que voy por el camino correcto. 

Besos♥

lunes, 11 de enero de 2016

Propósitos del 2016.

¡Hi! Bueno, después de unos largos días sin escribir una entrada, he decidido escribir. Si no he escrito en tantos días es porque estaba muy desanimada por algunos problemas personales que, a decir verdad, me han atormentado durante muchos años. La cosa es que un día me he levantado y me dije a mi misma: "Debo buscar un propósito por el cual mantenerme en pie cada día." Pero, antes que nada me hice una pregunta que quizás nadie se haya formulado: "¿Que es un propósito?" Según algunos diccionarios un propósito es "algo que se pretende alcanzar a corto o a largo plazo", pues, es así. Un propósito es una meta que nos fijamos. 

Sin embargo, TODOS nos fijamos una meta, pero JAMAS la cumplimos por múltiples razones. Unos por pereza, otros porque "nunca tienen tiempo." ¿Quieren que les de mi humilde opinión? Eso de que no tienen tiempo, son puras EXCUSAS. Para cumplir un propósito solo se necesitan dos cosas: una es el deseo y la otra es la disciplina. Para cumplir un determinado propósito, debemos desearlo demasiado y cumplirlo, no porque la familia te presione o porque todos te dicen que deberías hacerlo, sino POR TI Y NADA MAS QUE POR TI. Por supuesto, debemos llevar una buena disciplina y no hablo de que nos matemos en conseguir lo que nos proponemos, sino que cada dia seamos constantes y que nunca nos dejemos abrazar por ese mal tan grave que es la pereza. Es por eso, que hoy me he animado a hacer una lista de unos cuantos propósitos que deseo cumplir a largo plazo en este 2016.

1-Ser organizada. Lo admito, soy mega desorganizada en MUCHOS aspectos.

2-Bajar 20 kilos alrededor de un año. Esto no lo hago por modas o por mi físico, es que deseo estar en un peso saludable.

3-Leer varios libros. En este punto, deseo leer libros y terminarlos. Casi nunca los termino.

4-No aferrarme a la PC. Duele, pero debo buscar actividades que me ayuden a no estar pegada 24/7 a una computadora.

5-Llevar una vida consagrada en la Iglesia.

6-Dejar fuera los pensamientos negativos. 

7-Escribir mas en el blog.

8-Ser caritativa.

9-Llamar a mis seres queridos. No es que no me preocupe, pero a veces no llamo a mis seres queridos por una cuestión de que odio hablar por el teléfono.

10-Llevar una vida mas sana y activa. Cuando digo "sana", no crean que es adelgazar y hacer ejercicio. Es una cuestión de comer sano, consentirme, tener una buena autoestima, no ayunar, pensar cosas positivas.

Bueno chicos, mi pregunta es: ¿Tienen algún propósito para este año?

Besos♥
Animated Flashy Black Outlined Love
Free Black Glitter Link Select Cursors at www.totallyfreecursors.com
Free Black Glitter Pointer Cursors at www.totallyfreecursors.com